La antigua estación de Caravaca acoge la sede del Consorcio de la Vía Verde del Noroeste (Murcia)
El Consorcio Turístico Vía Verde del Nororeste, encargado de la gestión de este itinerario se ubica en el recién rehabilitado edificio de viajeros de la antigua estación de ferrocarril de Caravaca de la Cruz.
Desde el pasado mes de octubre la antigua estación de Caravaca ubicada en la Vía Verde del Noroeste (Murcia) acoge la sede oficial de las oficinas de este órgano gestor, compartiendo edificio con otro nuevo uso: el albergue de peregrinos.
En la nueva sede se va a trabajar en la puesta en marcha del Programa de Dinamización y Puesta en valor de la Vía Verde del Noroeste, que, con una duración de nueve meses, tendrá como objetivo prioritario trabajar en la promoción del valioso patrimonio cultural y paisajístico de la zona del noroeste murciano. Con financiación del Fondo Social Europeo y del Servicio Regional de Empleo y Formación, se ha contratado una educadora social para la consecución de proyectos europeos y para la realización de actividades de promoción y puesta en valor de la Vía Verde del Noroeste.
El Consorcio Turístico Vía Verde del Noroeste se creó para la cooperación técnica, económica y administrativa de la Vía Verde y los municipios que la componen. El Consorcio está formado por la Consejería de Cultura y Turismo de la Región de Murcia y los municipios por los que transita la Vía Verde: Murcia, Molina de Segura, Alguazas, Campos del Río, Albudeite, Mula, Bullas, Cehegín y Caravaca de la Cruz. Desde su creación, se han puesto en marcha varios proyectos para promover la vía verde como uno de los principales itinerarios ecoturísticos de la Región de Murcia y como camino de peregrinación a la ciudad santa de Caravaca de la Cruz. La creación de la Red de Albergues o la señalización de los escenarios paisajísticos son algunas de las actuaciones ejecutadas.
En España existen 70 antiguas estaciones de ferrocarril que han sido rehabilitadas como equipamientos para acoger nuevos usos. Sedes de los órganos de gestión, alojamiento, restauración, alquiler de bicicletas, museos y centros de interpretación, son nuevos equipamientos turísticos para los visitantes de las Vías Verdes. Se trata de buenos ejemplos de contribución a la conservación del patrimonio arquitectónico ferroviario y la creación de empleo local.