Vía Verde de Kadagua
Historia del Ferrocarril
El Kadagua es un cauce que une las merindades burgalesas con el Nervión. 70 km de curso que en sus últimos 45 km se acompañaron de trenes. Concretamente en los últimos 30 km llegó a ver hasta dos líneas paralelas, una por cada lado del río, y ambas de vía métrica. Los primeros raíles llegaron a Balmaseda desde Bilbao en 1890 de las manos del “Ferrocarril del Cadagua”. Una línea de evidente vocación para viajeros creada por empresarios vascos, que fue refrendada por el éxito desde su mismo arranque. Tal fue así que en 1896 sus promotores pusieron en servicio una línea que, desde su estación en Aranguren conectaba, por Solares, con Santander, lo cual revalidó aún más el éxito de esta propuesta.
Un par de años más tarde, en 1892, llegan otros raíles métricos a la zona. Son los del “Ferrocarril de La Robla”, un enorme ferrocarril carbonero que acarreaba este combustible pétreo desde los yacimientos del norte de Burgos, Palencia y León, hasta la siderurgia vasca. Para este último tramo La Robla a Bilbao se llegó a un acuerdo con el “Fc Santander-Bilbao” (aquel primer Fc. del Cadagua) para encaminar sus trenes hasta la margen izquierda del Nervión aprovechando sus vías. Pero las cosas no fueron bien, y La Robla prefirió renunciar a aquella línea y hacerse su propio itinerario por la margen derecha del río tal que en 1911.
Y así fue hasta que en 1972 la empresa pública FEVE se hizo con La Robla. Esta empresa ya explotaba el trazado del Santander-Bilbao, por lo cual acabó con aquella duplicidad antieconómica de líneas, cerrando aquel último tramo entre Balmaseda e Iráuregi, que es por donde ahora se ha situado este tramo de vía verde.