Las vías verdes que se asientan sobre el nonato ferrocarril Linares-Baeza - Utiel representan ya más de 143 km en las provincias de Albacete y Jaén. El que describimos aquí es la conocida como Vía Verde de la Sierra de Alcaraz, de 77 km. El tramo siguiente Reolid – Segura de 46,5 km se describe en otras páginas de esta web así como las vías verdes del Guadalimar y Linares. Un largo itinerario que se va construyendo poco a poco y que esperemos que a medio plazo sea un continuo entre Albacete y Linares-Baeza. Sin duda un itinerario de largo recorrido de enorme atractivo.

Las estribaciones de Albacete

Ponemos el inicio de la ruta (km.0) en el parque de la Fiesta del Árbol en la ciudad de Albacete. Desde aquí seguiremos la estela del Camino Natural Canal de Mª Cristina y sus ramales. Siguiendo las indicaciones y recorriendo varios tramos de esta red de canales recuperados para el paseo veremos la indicada como Ruta Don Quijote hasta un área de descanso, punto donde comienza propiamente el primer tramo de la Vía Verde (km 6,5)

Arranca la ruta como un camino asfaltado que se tornará poco más adelante en una amplia pista de tierra que avanza sin tregua en largas rectas a nivel, por un terreno completamente llano sembrado de cereal y segundas residencias, hasta alcanzar el área de descanso que hay junto a la Estación de San Jorge (km 9). Sin tregua avanza la llanura infinita sembrada de maíz, trigo, ajos, alfalfa o patatas describiendo el camino unas rectas inagotables.

En el más absoluto silencio, la vía atravesará varios pasos superiores y la estación de Santa Ana únicos elementos capaces de aseverar que este camino estaba destinado a sostener el paso del tren.

Al atravesar el canal del trasvase Tajo-Segura (km 16,2) el llano de los campos agrícolas presenta vegetación de coscojas, encinas achaparradas y un tapiz arbustivo de romeros y espartos. Dada la rectitud y la llanura este cambio de paisaje será muy celebrado por los sentidos.

Desvío de Balazote

Una interrupción del trazado en el km 25 obliga a abandonar la traza del ferrocarril. Guiados en todo momento por mojones de la Ruta de Don Quijote, nos desviaremos a la derecha por un camino que con duce al km 328,8 de la carretera N-322. A partir de ahora ¡mucho cuidado! pues habrá que circular durante casi 4 km en dirección a Alcaraz por el ancho arcén de esta carretera. Iremos acercándonos a la localidad de Balazote y su orla de cerros rojizos. Este será el mejor punto si queremos acceder a la localidad.

Aunque sus raíces nos lleven al Balat al Suf en árabe, Balazote fue habitada desde mucho más antiguo, como prueban el hallazgo de la bicha de Balazote y varias villas romanas. De las villas se rescataron mosaicos que están en el Museo Arqueológico de Albacete; y la afamada bicha, escultura íbera de incalculable valor arqueológico con cuerpo de toro y cabeza humana barbada, descansa en el museo Arqueológico Nacional en Madrid, un tesoro cultural e histórico encontrado en estas tierras.

Superamos en la circunvalación de la localidad la estación de servicio y la estampa de la antigua estación de Balazote (km 31,4). 100 m más allá del km 325 de la N-322 tomaremos a la izquierda una corta y empinada rampa que sube al trazado original del ferrocarril, poniendo fin al desvío de Balazote. 

Por la vega del río Jardín y desvío de la Torre de Albar Ruiz

Por estos lares el trazado del tren echó mano para sus propósitos de la cuenca del río Jardín, cuya amplia vega es un vergel agrícola de maíz, trigo, patatas y ajos junto con las choperas, perfilado por lomas cubiertas con un denso matorral. También las características de la plataforma ferroviaria cambian radicalmente: el recorrido torna ascendente, se acopla en la ladera izquierda elevándose sobre la vega, y avanza sobre terraplenes interrumpidos por intermitentes trincheras de considerable profundidad, excavadas en materiales de vivos rojizos. ¡Y empieza la zona de  túneles, no todos ellos iluminados!

Superado el primer túnel tendremos que abandonar el trazado ferroviario por segunda vez (km 35,1). Un camino alternativo señalizado a la derecha por las marcas de la Ruta de Don Quijote, cruza por un puente de madera el río Jardín para situarse nuevamente al pie la carretera transitada N-322. Junto a esta carretera pero esta vez discurriendo por un camino avanzamos en subida con cierto esfuerzo durante un par de kilómetros. Alcanzada la Torre de Albar Ruiz el trazado alternativo baja de nuevo a la vega y atraviesa el río de nuevo por un segundo puente de madera, tras el cual aparece una corta rampa que nos devuelve a la añorada vía verde. Estamos ante el segundo túnel ferroviario del recorrido (km 37,9). Con el mismo paisaje como telón de fondo, pero perfilada por encinas y ailantos, la ruta cruza  a nivel la carretera CM 313. Siempre, precaución en los cruces.  

El río Jardín y el preámbulo montañoso

Pasada la estación de San Pedro-Las Alamedas (km 40) nos internamos en la cuenca del río Jardín, donde nogales, ailantos, fresnos, álamos, cañas y saúcos remarcan el curso acuático. A partir del km 44 los márgenes montañosos estrangulan el curso del río Jardín, obligándole a retorcerse y adquirir una enorme plasticidad ¡quién lo hubiera dicho durante los primeros 30 kilómetros! En un terreno tan abrupto, al ferrocarril no le quedó más remedio que ir excavando hasta cuatro túneles curvos y largos, entre los que media una esplendorosa naturaleza perfumada por el pinar. Sin duda, este tramo goza de una gran espectacularidad, enardecida aún más por las sensaciones de circular por estas infraestructuras subterráneas. Y vamos ya por el sexto y séptimo túnel, este último bastante largo (km 48). 

El área de descanso en la pedanía de El Jardín es un nuevo punto de parada y el inicio del tramo acondicionado como auténtica vía verde, que se nota por el cambio en la pavimentación, señalización, zonas de descanso y sobre todo en la iluminación de los túneles. El acceso a la pedanía es fácil y en ella encontraremos bares y tiendas de productos típicos. Un buen lugar para hacer un alto en el camino. 

Pasada el área y pedanía de El Jardín la vía se adentra en dos túneles ferroviarios consecutivos, muy largos y curvos. El río Jardín resultado de la confluencia del exiguo río Cubillo y del generoso aporte del río Arquillo, forma aguas arriba la laguna del Arquillo, Monumento Natural en el que hallan refugio numerosas anátidas. 

El río Cubillo y la estación de Robledo

A partir de la ruinosa estación de La Rambla (km 53,6) las laderas que encierran al río Cubillo suavizan su aspecto mientras la vega del Cubillo se ensancha cubriéndose por una marea de trigales que se extienden hacia la Reserva Natural Laguna Ojos de Villaverde, que se jacta de poseer la mayor riqueza biológica de toda la provincia de Albacete. Unos prismáticos deben ser siempre un básico en nuestras salidas al campo.

A tan sólo 3 km llegamos a la pequeña aldea de Los Chopes donde atravesamos el túnel más largo de nuestro recorrido (770 m e iluminado!) y después un nuevo punto de avituallamiento en El Cubillo. En el km 64,7 la vía supera un área de descanso, deja a la izquierda la estación de Robledo, ahora recuperada como alojamiento rural y pasa bajo la carretera N 322 para salir a campo abierto. Atrás quedan túneles y trincheras. Por delante nos espera un altiplano de suaves ondulaciones sin grandes desniveles, pero sí donde luchar contra un viento persistente.

El descenso hacia Alcaraz

En la ruinosa estación de Salinero (km 68,9), hoy una cuadra para cabras, la vía alcanza su punto más alto y obtiene las primeras vistas a la sierra de Alcaraz. 

Y con Alcaraz en el punto de mira, continuamos descendiendo por una vía aterrazada en la ladera este del cerro del Águila que ofrece buenas vistas a los trigales y barbechos del valle del río Horcajo entre suaves ondulaciones coronadas de encinas.

Estas vistas concluyen al introducirse en los casi infinitos y sombríos túneles 16 y 17 de nuestra ruta mientras la vía vuela sobre los viaductos de Solanilla: dos imponentes miradores al caserío de Solanilla, a la ciudad de Alcaraz y al Santuario de la Virgen de Cortes encaramado en la ladera montañosa de la localidad serrana. 

A partir de aquí se inicia un continuado y suave descenso hasta la salida del último túnel que pone fin a este tramo de vía verde. Antes de alcanzar el Santuario (km 77), habremos cruzado a través de una nueva pasarela la transitada carretera N-322. Desde aquí hasta la villa de Alcaraz quedan unos 4 km que podremos hacer sin dificultad a través de pistas acondicionadas que desde el Santuario llevan hasta la localidad entrando por la Avda. de España. Una parada en la villa y el disfrute de la misma serán un imprescindible de esta vía verde.

Nuestra ruta acaba aquí. Hay que saber que hasta la estación de Reolid la vía se encuentra sin acondicionar e intransitable durante 16 km. No obstante, desde Reolid y hasta Arroyo del Ojanco en la provincial de Jaén disponemos de otros 46,5 km de vía verde para seguir disfrutando del nonato FC. Linares-Baeza - Utiel. Os lo contamos en esta misma página web.